¿Aún no has visitado San Lorenzo de El Escorial?

Basta tomar un Cercanías en Atocha para ubicarse en unas de las localidades con más solera de la Comunidad de Madrid, como es San Lorenzo de El Escorial, sede de uno de los Sitios Reales más impresionantes: el monasterio que mandó construir Felipe II a mediados del siglo XV. Desde finales del siglo XVI fue considerado la ‘Octava maravilla del mundo’ y su arquitectura es el mayor símbolo del estilo herreriano. Su estilo geométrico es característico, con la austeridad como norma general de estilo, así como la extrema horizontalidad, exteriores de pizarra y esos chapiteles tan típicos que más tarde el franquismo reutilizaría por aquello de volver a las esencias imperiales (véase el edificio del Ejército del Aire, en Moncloa).

Pero su valor no sólo reside en el exterior, sino que su interior merece tanto o más la pena, gracias a espacios dignos de visitar como la biblioteca, con una preciosa bóveda de cañón bajo la que descansan  más de 40.000 volúmenes de incalculable valor. Prepara tu visita con antelación y adquiere la entrada a través de esta página oficial. De abril a septiembre, el edificio se puede visitar por dentro de 10 a 20h, en una visita libre de unas dos horas de duración, cuya entrada básica cuesta 10 euros.

Pero ahí más atractivo además del imponente edificio proyectado por Juan de Herrera. Un paseo por la calle Floridablanca, recoleta arteria central con ese aire burgués de las pequeñas ciudades prósperas, tiene un gran encanto. Allí, se encuentra el teatro Real Coliseo Carlos III, una joya dentro del mundo de las artes escénicas, pues fue construido en pleno siglo XVIII y conserva todo ese espíritu ilustrado. En este enlace puedes consultar su programación y comprar las correspondientes entradas.

Y para terminar el día, nada tan agradable como un sofisticado café de los que preparan, en ese ambiente entre modernista y afrancesado, del cafetín Croché.

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