Los dulces navideños más dulces y más navideños

La llegada del invierno aumenta nuestra necesidad de glucosa. Tanta oscuridad hay que mitigarla como un poco de azúcar en sangre. ¿Dónde? Pues en lugares tan tradicionales como La Mallorquina, en plena Puerta del Sol, esquina calle Mayor. Ofrecen turrones artesanales —no te pierdas el de yema— y roscones de Reyes, que se pueden disfrutar en la planta superior, distinta de la tienda-pastelería. Y, con más de 20 reposteros en plantilla, por supuesto que ofrecen pasteles de muy diversos tipos que te trasladarán vía gusto al Madrid antiguo.

No tan conocida pero sin duda una de las confiterías más añejas de la capital (en pie desde 1855) es El Riojano, especialistas en roscón de Reyes, polvorones, mantecados y por supuesto turrones. Dicen que debe su nombre al pastelero que la fundó, a instancia de la reina María Cristina, y es ideal para una merienda o empezar el día desayunando en su salón interior. Perfecto para impregnarse de ese ambiente entrañable de confitería de toda la vida y pasear después por la plaza Mayor, como en una película de época.

Otra pastelería de las antiguas y con solera es Casa Mira, en carrera de San Jerónimo 30, junto a Lhardy. Fundada nada menos que en 1842, una de sus especialidades es el turrón navideño, de elaboración 100% artesanal, señalan en la web, sin aditivos ni conservantes. Lo venden al peso y el precio habla de su calidad, ya que un kilo se vende por 46 euros, por lo que una tableta, que suele pesar 300 gramos, saldría por unos 15 euros, que es una cantidad razonable. Y un buen regalo, por cierto.

Por último, te recomendamos una visita a Matadero con motivo de ‘La Navideña. Feria Internacional de las Culturas’, donde podrás disfrutar de demostraciones de cocina en vivo, ya sea dulce o en versión salada. Consulta aquí su programa de actividades y planifica tu visita entre los días 15 y 23 de diciembre.

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