Un poco de Romanticismo
El siglo XIX fue una época convulsa, antesala de las vanguardias artísticas y en la que se cocieron corrientes como el romanticismo, una forma de estar en el mundo apasionada, radical, sin medias tintas. Como la que llevó Mariano José de Larra, uno de los periodistas más ilustres de las letras españolas, que firmaba sus artículos bajo el seudónimo de Fígaro.
Fue un tiempo también en que la decoración de las familias más pudientes alcanzó su paroxismo con el rococó: cómodas abigarradas, lujosos relojes, canapés, cuadros, vajillas, chaise-longues…. El reto era no dejar un hueco libre, como se puede comprobar en un itinerario por el Museo del Romanticismo.
Fundado en 1921 en la calle número 13 de la calle San Mateo (metro Tribunal), el Museo del Romanticismo cuenta con un rico fondo artístico y decorativo donado por personas e instituciones, como Patrimonio Nacional o las las Fundaciones Vega Inclán o Mariano Rodríguez de Rivas, entre el que destaca una pistola como la que usó el citado Larra para acabar con su vida y sus tribulaciones amorosas.
El museo nos permite conocer cómo era la vida cotidiana en las casas más refinadas de aquella España, con sofás con tapicerías de ensueño, consolas-tocador con las mejores maderas, armarios tan particulares como el entredós, con ilustraciones de inspiración japonesa.
Impagable es también su colección de pintura, con retratos que permiten hacerse una idea de los tipos humanos de época, como el de la señora de Vargas Machuca, que bien podría ser una de las moradoras de esos viviendas tan recargadas como la que se recrea en el museo. Pero también muchos objetos de gran delicadeza, como el conjunto de pitillera, purera y cerillera de nácar con incrustaciones, muñecas de la época o refinados abanicos fabricados en Francia.
Y no culminen la visita sin pasar por el Café del Jardín, un pequeño oasis de elegancia donde disfrutar de exquisitas tartas caseras en un lugar con mucho encanto, al que se puede acceder sin necesidad de adquirir la entrada al museo. Estas tienen un precio general de 3 euros. Abierto todos los días de 9.30 a 18.30h y domingos y festivos de 10 a 15h.
Desde nuestro hotel con encanto en el centro de Madrid es muy fácil visitar el Museo del Romanticismo. Basta con tomar la línea 5 de metro en la misma plaza de Puerta de Toledo donde nos encontramos y bajarnos en la estación de Alonso Martínez, desde la que estamos a unos 10 minutos a pie.
Foto: Outisnn via Wikimedia Commons. Licencia CC 3.0.
Categorías: Madrid Cultura
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